En México, el 18 de junio, Día del Padre, grupos de madres publicaron fotos y nombres en plazas públicas “malos pagadores de alimentos”, esos millones de padres que no pagan la pensión alimenticia. Para la tercera edición de esta movilización, los retratos de estos hombres han sido colgados de largos hilos con pinzas para la ropa, en lugares emblemáticos, como los juzgados, plazas centrales o frente al palacio presidencial, en la Ciudad de México.
Cada cartel de «deudor» indica además de su nombre, el monto de la deuda y un breve resumen de la disputa: por ejemplo, un gerente de empresa que se ha declarado insolvente mientras su negocio prospera, por ejemplo, un padre que se ha ido al extranjero «olvidar» sus tres hijos en México…
«La vergüenza social es más eficaz que la justicia», dice con una sonrisa Diana Luz, vocera del Frente Nacional de Madres contra los malos pagadores, colectivo nacido en 2021 y presente hoy en treinta de los treinta y dos estados del país.
En México la situación de abandono de las madres solteras siempre ha existido en todas las clases sociales: en siete casos de divorcio de cada diez los padres no pagan la pensión alimenticia adeudada. Esto representa casi treinta y cinco millones de madres, o el 67.5 por ciento de las madres solteras en México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
“Medidas de Restricción de Inmigración”
Este año, Diana Luz, de 36 años, tiene una amplia sonrisa, porque se ha ganado una gran batalla: las madres obtuvieron, a finales de abril, la creación de un registro nacional de obligaciones alimenticias, que lleva el Instituto de Atención a toda la Infancia, una de sus principales peticiones. El padre que incumpla sus obligaciones ya no podrá renovar su pasaporte o licencia de conducir, no tendrá derecho a comprar ni vender bienes. Y, si se vuelve a casar, el día de la ceremonia se hará pública su situación de mal pagador.
Para reclamar un cargo judicial o ser elegido, los hombres ahora tendrán que presentar un certificado de «no registro» con este registro.. “Además, hay medidas para restringir la migración, para evitar que los registrados allí salgan del país”, dijo la senadora Olga Sánchez, ex jueza de la Corte Suprema que llevó a cabo este proyecto para el partido Morena (a la izquierda, en el poder).
“Lo importante era tener un registro público, porque ahora, con un solo nombre, se puede saber si la persona es mal pagadora o no”, exulta Diana Luz. Hasta el momento, unos veintidós estados de la República Mexicana se han jactado de haber establecido dichos registros, incluido el de la Ciudad de México desde 2011. “En realidad solo funcionaban ocho registros, y para encontrarlo era necesario tener el código fiscal de la persona, relativiza a Diana Luz. Sin embargo, sus ex novias no siempre los tienen. Por otro lado, estos registros no dieron lugar a ninguna sanción real. »
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