“Las preocupaciones persisten. » En el momento de la audiencia, el 24 de mayo, de la ministra de Cultura, Rima Abdul Malak, en la Comisión de Asuntos Culturalesla diputada Claudia Rouaux (Partido Socialista) recordó que no han cesado los temores sobre los medios de seguridad de los que disponen los eventos culturales durante el verano de 2024. Y la conducta de algunos de ellos sigue sujeta a cautela.
El día anterior, el ministro del Interior, Gérald Darmanin, acababa de confirmar que habría 35.000 policías y gendarmes movilizados en París el 26 de julio de 2024 para la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos. Diariamente, el evento en su conjunto (del 26 de julio al 8 de agosto) movilizará aproximadamente a 30.000 agentes del orden público y entre 17.000 y 22.000 agentes de seguridad privada.
EL «Los encuentros organizados en la prefectura no responden a preguntas sobre seguridad en torno a las fiestas»también había deplorado, una semana antes, la senadora Sylvie Robert (Partido Socialista) con motivo de la presentación de un primer informe sobre la marcha de la misión senatorial encargada de seguir los preparativos de los Juegos. «Las reuniones locales sobre la preparación para el verano de 2024 no avanzan»él había agregadoY Senadora Sonia de La Provôté (Unión de Centro).
“Todos los festivales que requieran la presencia de unidades móviles de fuerza se realizarán durante el verano de 2024”asegura mMí mismo Abdul Malak ante los diputados, recordando este «ajustes» tuvo lugar para “veinte o treinta festivales muy grandes que atraen audiencias tan grandes que tienen que ser asegurados por unidades de las fuerzas móviles”. “Hemos cambiado las fechas de un pequeño número de festivales muy grandes”ella añadió.
Aún no hay solución para Lollapalooza
El ministro lo dejó claro«Solo queda un caso durante: el festival Lollapalooza»generalmente se lleva a cabo en el hipódromo de Longchamp. «En coordinación con el alcalde de Sceaux, hemos propuesto que este municipio lo acepte, pero esta solución aún no ha tenido éxito»Ella explicó.
Pero son menos los grandes festivales que los más pequeños los que preocupan a algunos funcionarios electos. “Por supuesto, las fechas de los más grandes podrían moverse, pero queda la incertidumbre para muchos otros, más pequeños, cuyos organizadores están preocupados por la idea de que no se puedan llevar a cabo”argumentó el diputado (La France insoumise) Alexis Corbière.
Así lo subraya también el Consejo Económico, Social y Medioambiental (CESE), en un informe titulado «Crisis del sector cultural: la urgencia de actuar»lanzado el 9 de mayo. “El riesgo de falta de recursos humanos podría combinarse con el riesgo de equipo técnico insuficiente”observa el CESE, considerando que existen «una pregunta importante sobre la conducta real de todos los eventos».
Fuera de las manifestaciones «al aire libre, de pie, con numeroso público y cuya seguridad requiere la presencia de unidades móviles de fuerza», «las fechas de todas las demás fiestas seguirán el procedimiento habitual, pida autorización a la prefectura y nada cambiará»asegura mMí mismo Rima Abdul Malak, lanzando a los diputados: “El verano de 2024 será tanto deportivo como cultural. »