Los cuatro niños colombianos encontrados el viernes 9 de junio, luego de cuarenta días en la selva amazónica, entregaron a sus seres queridos los primeros elementos de su largo periplo. Según el testimonio recogido por el padre de dos de los menores, Manuel Miller Ranoque Morales, la madre de los niños es “vivió cuatro días”, después de que el avión en el que se encontraban se estrellara, antes de sucumbir a sus heridas.
«Antes de que murieran, su madre les dijo: ‘Adelante, adelante’ [rejoindre votre père] “, explicó el señor Ranoque, durante una rueda de prensa frente al hospital militar de Bogotá, donde se atiende a niños que, según él, «habla poco».
“Estoy esperando que los niños se recuperen (…). No es tan fácil hacerles preguntas». después de lo que han pasado, dijo de nuevo, presionado por una multitud de reporteros. “Después de pasar por tal tragedia, necesitan recuperar su fuerza. (…). Realmente no podíamos hablarcomentó, por su parte, Fidencio Valencia, el abuelo de los niños. juegan con regalos [qu’ils ont reçus], son buenos, estan en buenas manos (…). No podemos alimentarlos demasiado en este momento. Todo esto es un proceso que llevará tiempo. »
«Es un milagro de Dios. Damos gracias a Dios que mantuvo con vida a los niños»Ranoque continuó. “Como pueblos indígenas, hemos demostrado al mundo de lo que somos capaces. Encontramos el avión, encontramos a los niños»bienvenido
Lesly (13 años), Soleiny (9 años), Tien Noriel (5 años) y Cristin (1 año) fueron encontrados con vida por rescatistas el viernes por la tarde, vagando solos en el bosque después del accidente, el 1em May, desde la pequeña avioneta Cessna 206 en la que viajaban con su madre, el piloto y un familiar. Los tres adultos murieron en el accidente.
» Estoy hambriento «
El avión de Avianline Charters había salido de una zona boscosa conocida como Araracuara para dirigirse a San José del Guaviare (Sur), una de las principales ciudades de la Amazonía colombiana, a unos 350 km de distancia, antes de desaparecer del radar. El piloto acababa de informar de un problema en el motor.
Los militares encontraron la avioneta entre el 15 y el 16 de mayo, en posición vertical, con el morro pegado al suelo, en medio de una densa vegetación, con el piloto muerto en la cabina. El jefe indígena y la madre de familia también fueron encontrados muertos, sin que los soldados especificaran dónde exactamente.
RTVC, la televisión pública colombiana, transmitió el domingo por la tarde el video del momento del encuentro entre los cuatro niños, que llevaban cuarenta días deambulando por la selva, y sus rescatadores indígenas. En estas imágenes tomadas con el teléfono móvil se pueden ver a los niños demacrados, el más pequeño en brazos de uno de sus salvadores. Todos están terriblemente demacrados.
Sus salvadores, miembros de la guardia indígena, cantan, fuman tabaco (planta sagrada entre los indígenas) y dan gracias con alegría. Invitados al plató de RTVC, relataron los primeros momentos del encuentro. “La hija mayor, Lesly, con la pequeña en brazos, corrió hacia mí. Lesly dijo ‘tengo hambre'»dijo Nicolás Ordóñez Gomes, uno de los miembros del equipo. Uno de los dos niños estaba acostado. Se puso de pie y me dijo «mi madre está muerta». » “Inmediatamente nos siguieron con palabras positivas, diciendo que éramos amigos, que veníamos de la familia, del padre, del tío. que éramos una familia»detalló el Sr. Ordóñez Gomes.
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Manuel Miller Ranoque Morales había protestado por la transmisión más temprano ese día. «en las redes sociales» fotos de sus hijos en su habitación de hospital: » No está bien «, estimó. La prensa colombiana comenzó a dar detalles de su calvario. Durante el trayecto, los niños pudieron utilizar un mosquitero, una toalla, un mínimo de material de acampada, dos teléfonos móviles (con pilas de descarga rápida), una linterna y una pequeña caja de música.
El padre amenazado por un grupo armado disidente de las FARC
El señor Ranoque también volvió sobre las amenazas que provocaron la salida en avión de la familia del Guaviare. “Estoy amenazado por el Frente Carolina Ramírez” de disidentes de las FARC, dijo, sin precisar los motivos de estas amenazas. “Sé que estas personas sin escrúpulos pueden comenzar a presionar nuevamente y nunca lo permitiré. Dijeron que me recogerían en Bogotá (…). Todo lo que quieren es interés financiero, y hasta que no te unas a ellos eres un enemigo».acusó.
Toda esta parte amazónica del sur del país es un bastión histórico de las FARC, que imponen una «impuesto» revolucionario. La búsqueda de los niños por parte del ejército fue también una carrera contrarreloj para evitar que este grupo armado, con el que el Gobierno acababa de romper un frágil alto el fuego, pusiera sus manos primero sobre los jóvenes supervivientes. .
Después de más de un mes de búsquedas infructuosas, el ejército estaba a punto de reducir sus activos cuando descubrió a los niños. “Cada día que empezaba nos decíamos: ¡hoy los encontramos! »dijo un soldado, citado por un semanario. El Ejército dice hoy que continúa su búsqueda para encontrar un perro rastreador perdido en la jungla mientras rastreaba a los niños.
