Nadie hubiera apostado por este resultado. En cualquier caso, ciertamente no Tom Steels, el director deportivo de Soudal Quick-Step, quien estimó su probabilidad en “1.5%”. Sin embargo, la fuga se resistió al regreso del grupo, durante las 18.00 horas.Y etapa del Tour de Francia, en Bourg-en-Bresse, jueves 20 de julio. De los fugitivos, Kasper Asgreen fue el más rápido. El danés puso en juego al holandés Pascal Eenkhoorn (Lotto-Dstny) y al noruego Jonas Abrahamsen (Uno-X). Ofrece el primer éxito de su carrera en el programa. También es la primera victoria de su equipo en este 110Y edición, hasta ahora muy complicada para esta formación en la que aparece Julian Alaphilippe.
Después de ocho días difíciles, entre recorridos accidentados y montañosos, los 152 corredores aún inscritos al inicio de la prueba habían olvidado lo que era un recorrido casi totalmente llano. Una oportunidad para Jasper Philipsen y su formación Alpecin-Deceuninck de rememorar los buenos recuerdos del grupo, tras los éxitos recogidos en Bayona (Pirineos Atlánticos), Nogaro (Gers), Burdeos y Moulins, pensamos.
Ironía de la historia: fue un equipo de velocistas el que ganó, pero cuyo finisher, Fabio Jakobsen, se había rendido antes de las 12Y escenario, víctima de una caída. “Revisé hoy y mañana. Estaba muy motivado para devolver algo a todo el equipo, [à] Mis compañeros de equipo, [à] todas las personas que nos ayudan. Quería apuntar a la victoria de etapa.explica Asgreen. Por supuesto, la situación no era ideal. Me hubiera gustado empezar con más corredores, pero es la última semana del Tour, no es la primera vez que un montón consigue ganar a los equipos de velocistas. ¡Lo creí! »
El ganador del Tour de Flandes 2021 hizo las maletas más temprano ese día, junto con el noruego Jonas Abrahamsen (Uno-X) y el belga Victor Campenaerts (Lotto-Dstny). El trío nunca tuvo una ventaja de más de 1 minuto y 20 segundos sobre el resto de corredores, pero pudo contar con la inestimable aportación de un cuarto hombre, Pascal Eenkhoorn. Molesto por el propio Jasper Philipsen, decidido a evitar que abandonara el grupo, el holandés permitió que Lotto-Dstny fuera superado en número en la escapada y vio cómo Campenaerts se sacrificaba en la final, para disgusto del grupo.
“Un poco de apoyo hubiera estado bien”
Si su escapada logró terminar en cabeza, también es gracias a los compañeros del danés, Julian Alaphilippe y Tim Declercq, quienes hicieron todo lo posible para interrumpir la persecución del grupo al insertarse constantemente en medio de las formaciones de velocistas que intentaban organizarse para atrapar a los cuatro fugitivos. Pero tras las sucesivas retiradas de Mark Cavendish (Astana-Qazaqstan), Caleb Ewan (Lotto-Dstny), Phil Bauhaus (Bahrain-Victorious) y Wout van Aert (Jumbo-Visma), hay menos aspirantes a la victoria de etapa que en las dos primeras semanas del Tour. Consecuencia: pocos equipos tenían interés en correr para recuperar la escapada, lo que habría beneficiado a Jasper Philipsen, finalmente al pie del podio.
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